El 31 de enero, salimos los mismos de siempre; Agustín, Rafa, Felipe y yo, ahora a recorrer un tramo de brecha en la Sierra del Halo en la región sur del estado de Jalisco e internarnos en sus bosques y ver qué tipo de orquídeas podíamos encontrar. Ya hemos recorrido esta zona en ocasiones anteriores y habíamos podido ver una buena cantidad de especies, así que hicimos otra salida para ver con qué novedades nos topábamos.
El grupo
Entramos a la sierra por los Llanitos por una terracería en buen estado, por lo menos al principio. Al inicio del camino la vegetación es selva seca con algunos manchones de encinares y por supuesto potreros con pastizales,Selva baja
Prostechea lancifolia
conforme va uno subiendo la vegetación va cambiando a bosques templados y más tupidos, algunos bien conservados y muchos evidentemente explotados, también pasamos por algunos tramos de bosque con características de bosque Mesófilo a unos 1500 msnm
Hintonella mexicana, una de las rarezas de esta sierra
Mormodes luxatum
y así subiendo la sierra llegamos a la parte alta unos 2040 metros de altitud donde acampamos, donde nos alcanzaron las lluvias tan especiales que han estado cayendo esta temporada en nuestro país.
Vista de la sierra del Halo, poco antes del inicio de la tormenta
El campamento
El bosque templado
Epidendrum gomesii
Isochillus linearis
Aunque afortunadamente nada serio, el camino a estas alturas ya estaba bastante dañado y una tormenta fuerte podría bloquearlo fácilmente. De todos modos al día siguiente decidimos seguir hacia el sudeste rumbo a Tepalcatepec Michoacán y como dicen: no regresar ni pa’ tomar vuelo, de ahí en adelante el camino ya iba descendiendo y poniéndose más feo hasta llegar al poblado de Ahuijullo y de ahí en adelante el camino hasta Tepalcatepec, aunque ya mucho menos interesante con un valle dedicado a la agricultura y ganadería.
Escena lamentable de ignorancia